Puedes leer el último artículo de Infoanimal sobre las cotorras madrileñas pinchando en este enlace.
“Sin embargo, animales como las cotorras son excluidos arbitrariamente de nuestro ámbito de consideración moral por el hecho de no pertenecer a nuestro mismo grupo (la especie humana). El ámbito de consideración moral debería ser ampliado para incluir en el mismo a todos los individuos sintientes y autoconscientes. Todos los animales deben ser merecedores de unos derechos básicos que protejan sus intereses y les aseguren una vida sin explotación por parte de los seres humanos. Estos derechos básicos deberían incluir incuestionablemente, el derecho a la vida y el derecho a no ser utilizado como medio o como recurso para otro. Incluso cuando tal utilización suponga beneficios para los seres humanos, ya que el beneficio o disfrute que obtengamos de la explotación de un animal en ningún caso puede justificar la discriminación que ejercemos sobre él”.